El abogado, líder del movimiento Transformar y ex Alcalde de Valparaíso analizó con «Políticamente Directo», de Puranoticia.cl, lo que dejó la elección de segunda vuelta por las gobernaciones, entregando una mirada amplia tanto del nuevo escenario que se configura en la zona y en el país de cara a lo que ocurrirá en la presidencial y parlamentarias de 2025.
Con la satisfacción de que el escenario queda «completamente abierto» para las elecciones parlamentarias y presidencial del próximo año, pero con la advertencia de que se debe estar «inquietos» e «incómodos» a pesar de los buenos resultados en los comicios de segunda vuelta por las gobernaciones regionales, el ex alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp Fajardo, realizó un completo análisis de esta nueva configuración del mapa político una vez terminadas las votaciones en todo el país.
En conversación con el programa «Políticamente Directo», de Puranoticia.cl, el abogado de profesión y líder del movimiento Transformar, destacó los resultados positivos obtenidos por la izquierda y la centroizquierda en el país, aunque sí reconoció que la derecha y la ultraderecha avanzó en la conquista del poder de los espacios institucionales, al pasar de tener una Gobernación Regional a seis, pero también por los resultados obtenidos en los Consejos Regionales, Concejalías y Alcaldías emblemáticas.
En ese sentido, quien dejara atrás su proyecto de «Alcaldía Ciudadana» en la Municipalidad de Valparaíso el 14 de noviembre recién pasado, analizó lo que fue la contundente victoria de Rodrigo Mundaca en la región de Valparaíso, donde se alzó con la reelección como Gobernador tras obtener un 62% de las preferencias, es decir 25 puntos por encima de la candidata de Chile Vamos y toda la oposición, la UDI María José Hoffmann, quien sólo logró quedarse con el 37% de los sufragios en la zona.
«Teníamos las expectativas de que no ganara la derecha en la región, que el gobernador Mundaca tuviese una buena participación, y así fue… ganó por harto. Creo que la votación sí hay que analizarla bien, pero claramente expresa que la región de Valparaíso no está por girar a la derecha, sino por lo contrario: mantener una línea de cambios y de transformación y, por tanto, creo que al menos en la región el escenario queda completamente abierto para lo que viene«, sostuvo Sharp.
De igual forma, indicó en su análisis que el resultado obtenido por Rodrigo Mundaca en segunda vuelta es mixto, ya que «expresa la capacidad que tuvo de desarrollar una amplia alianza. La votación del gobernador Mundaca se explica, evidentemente, por el apoyo del Frente Amplio, del Socialismo Democrático y del campo donde hay fuerzas como el movimiento Transformar y el mundo independiente, que también tiene una importante presencia electoral en toda la región. Y se explica, además, por una especie de venganza a la Pepa Hoffmann y a la UDI«.
Y es que a juicio del abogado, la marca UDI está completamente desfondada en la región de Valparaíso: «Hay que pensar cómo llegó (Hoffmann) a la región, después de 12 años como Diputada, luego de ser una Diputada destacada en la región. Ella llega rompiendo la estantería de la derecha, peleándose con todo el mundo. Y pasa a segunda vuelta porque la UDI sigue siendo una fuerza con capacidad electoral, evidentemente, pero no logra articular a la derecha en torno a la segunda vuelta«.
Otro factor analizado por Jorge Sharp dice relación con los proyectos que los candidatos ofrecen, ya sea a nivel regional o país. En ese sentido, expuso que «en Chile hay un gran vacío de liderazgo –partamos de esa lógica– dada por la crisis de La Moneda, no sólo por Monsalve, sino que porque en Chile no se empuja ningún proyecto de sociedad. En la derecha nadie sabe, en el Gobierno tampoco. Ese vacío de liderazgos presionó a las elecciones municipales hacia definiciones de corte más nacional de cara a 2025«.
Este argumento lo ejemplificó con lo ocurrido en Valparaíso durante las pasadas elecciones de octubre, donde «sabíamos que era difícil que el Partido de la Gente (PDG) y Republicanos llegaran a entendimiento, si Parisi y Kast se estaban dando con todo por las redes sociales por sus candidatos. Entonces, como hay una ausencia muy grande de proyectos, al final lo que termina pasando es que termina dominando en la escena política la cuestión de las formas y los cálculos. Cuando el domingo escuchabas a los ganadores, todos hablaban de la forma, que ganó la forma de hacer política por sobre lo otro. Es importante eso, pero también el fondo».
Sobre este punto, ahondó que «hay un voto vinculado a la persona y que es muy difícil traspasar votos de una persona a otra. A Hoffmann le pasó eso: los votos de Venezian y Millones no son traspasables. Precisamente es un rasgo del escenario político que tenemos: como no hay proyectos, al final solo hay figuras, solo nombres, y ese es un problema para la política, y de eso se habla poco, porque lo que se requieren son proyectos y los líderes empujan proyectos, y los proyectos generan liderazgos».
«Entonces me parece que lo interesante de esta elección en la región de Valparaíso es que queda la pregunta de si este campo plural de fuerzas, con gente de centro izquierda, con el Socialismo Democrático, el Frente Amplio, figuras como el gobernador Mundaca, movimientos como el nuestro, son capaces de articularse en torno a ideas que puedan aparecer como proyecto de región«, añadió el ex jefe comunal porteño.
Uno de los factores a tener en cuenta y que Sharp no esquivó fue el hecho de que a pesar de los rimbombantes triunfos en las regiones de Valparaíso y Metropolitana, lo cierto es que las izquierdas perdieron cinco gobernaciones o, mejor dicho, las derechas se quedaron con cinco y no una como tenían hasta el momento (La Araucanía).
«La derecha avanza y eso es indudable. Avanza en la conquista del poder de los espacios institucionales y también en iniciación territorial y en un relato de lo que pasa en el país, que me preocupa mucho. Los resultados, si bien, son positivos desde la perspectiva del mundo progresista y de izquierda, creo que no se puede para nada dormir en los laureles. El resultado es un aliciente a la crisis del Gobierno. Efectivamente el haber conquistado con Orrego y Mundaca las regiones Metropolitana y de Valparaíso entrega barniz de tranquilidad, pero me llama la atención que nadie haya querido ir a celebrar con el Presidente Boric en La Moneda», analizó.
Luego, insistió en su evaluación de lo ocurrido el domingo que «para analizar hay que ver las dos elecciones, primera y segunda vuelta. El análisis que hacemos respecto a eso es que hay un avance indudable de la derecha, no solo en la conquista del poder regional, sino que también en los consejos regionales, concejos y alcaldías emblemáticas. El Frente Amplio pierde en manos de la derecha alcaldías que eran impensadas que se podían perder, como Ñuñoa, San Miguel, Quilpué o Til Til».
«Si bien, el resultado del gobernador Mundaca es muy buen resultado, el Core es de mayoría de derecha, con una fuerte presencia del Partido Republicano. La composición del Core Metropolitano no es tan distinto al de Valparaíso, entonces digo que estamos en un escenario donde la derecha avanzó. Hacía un cálculo un poco apresurado de la segunda vuelta: votaron 5,3 millones por candidatos progresistas de izquierda o independientes; y 5 millones y un poco más por candidatos de derecha y ultraderecha», sentenció el líder del movimiento Transformar.
Finalmente, respecto a lo que ocurrirá en la elección presidencial y en las parlamentarias del 16 de noviembre de 2025, Sharp planteó que lo ocurrido en los comicios, tanto de octubre como de noviembre, «se abre en el espacio de la izquierda y de la centroizquierda un gran debate. El escenario, desde la perspectiva de la presidencial y la parlamentaria, está completamente abierto. Creo que vamos a entrar a un año donde se llama el «Síndrome del pato cojo», eso es evidente, porque además el Presidente Boric y su Gobierno está en una crisis que, al parecer, no tiene fin».
Esto lo vinculó a lo ocurrido en la región Metropolitana, con el triunfo de Claudio Orrego por sobre Francisco Orrego: «Él no es una persona de izquierda, pero lo que expresa es una amplia alianza de fuerzas desde el centro político hacia la izquierda, con un liderazgo de centro. Creo que la elección de la derecha, de Francisco Orrego, no es mala votación, con 2,2 millones de votos que lo catapultan como un liderazgo de Renovación Nacional dentro de una eventual primaria. Ayer hablaba con Rodolfo Carter por WhatsApp… con mi amigo Rodolfo Carter (ríe), y me daba la impresión que en el caso de la derecha se va dibujando una primaria entre Carter, Matthei y Orrego».
Por último, el ex Alcalde de Valparaíso sostuvo que «hay un problema en la derecha, porque Evelyn Matthei expresa una derecha más clásica, más tradicional, más propia de la herencia de la dictadura, de esa trayectoria, de los partidos que vienen del tronco del Partido Nacional. Y orrego es de una derecha contestataria e irreverente (…) Orrego, más bien, lo que busca es parecerse a fenómenos como Milei, Trump o Bolsonaro. Busca ser una persona políticamente incorrecta que rompe el esquema tradicional de la derecha y le intenta hablar –que eso es interesante– a una franja de nuevos electores, que a propósito del voto obligatorio aparecen con claridad».
PURANOTICIA